Por: NotiPress
Este miércoles 13 de octubre 2021, el presidente de Rusia, Vladimir Putin comentó que su país se encuentra listo para ayudar a aliviar la crisis energética del continente europeo. Sin embargo, la propuesta quedó condicionada a asumir un pliego de condiciones planteadas por Moscú.
Las restricciones de energía en Europa, pusieron los ojos en Rusia, al representar este país un tercio de los suministros de la región. Esta cercanía llevó a que otras empresas y un grupo de parlamentarios de la Unión Europea culpara a Moscú por la escasez en el suministro de gas. No obstante, según lo declarado por Putin, Rusia estaría dispuesta a incrementar sus exportaciones de gas a la Unión Europea si se firman acuerdos de largo plazo con la gigante empresa de suministro de gas Gazprom.
Uno de estos acuerdos sería la puesta en marcha del polémico gasoducto Nord Stream 2. Al respecto, tanto Rusia como Europa se han visto envueltos en un conflicto sobre el nuevo gasoducto para suministrar gas ruso a Alemania. El proyecto se encuentra listo, pero sigue a la espera de la aprobación para comenzar a bombear. Esto debido a la oposición de Estados Unidos y algunas naciones de Europa que temen la dependencia del gas de Rusia.
En este sentido, la gigante firma rusa Gazprom anuncio durante septiembre que el gasoducto Nord Stream 2 se encuentra listo. Este proyecto atraviesa el mar báltico con una longitud de 1,225 km y cinco años en lograr terminar la obra con un costo de US$11 mil millones. Con esto, Rusia pretende duplicar las exportaciones de gas de Moscú a Alemania sin tener que pasar por Ucrania.
Vale recalcar que la demanda de energía se ha incrementado de manera acelerada a medida que las economías se recuperan de la pandemia. Este aumento en la demanda se ha visto reflejada en mayores precios de los combustibles, mayor inflación y un retroceso en la lucha contra los combustibles fósiles contaminantes.
Al respecto, Putin aseguró en conferencia de prensa, el mercado de gas no está equilibrado y no resulta predecible para los meses siguientes. No obstante, afirmó que Rusia está cumpliendo sus obligaciones contractuales con sus clientes de la Unión Europea y podría aumentar los suministros con algunas condiciones preferentes para su país. También el mandatario ruso descartó la idea de usar la energía como un arma y replicó “no tiene ningún fundamento” sospechar que esto es así.