A continuación, enlistamos algunos consejos para que elijas al coach que mejor se adapte a ti. Si te gusta correr, probablemente en más de una ocasión te has planteado la posibilidad de contratar a alguien que te apoye a conseguir tus metas, o a dar un paso más allá para superar tus límites.
Sin embargo a nivel mundial, 1 de cada 4 adultos no alcanza los niveles de actividad física recomendada, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), para evitar esto, es fundamental contar con el apoyo de un profesional que guíe el desempeño en la dirección correcta, pero hay algunas consideraciones a tener en cuenta.
Primero lo primero: identifica tus necesidades
Puede ser que te guste correr a determinadas horas al día para despejarte del trabajo y combatir los efectos del sedentarismo, o puede ser que después de un tiempo de practicar la disciplina, ahora te plantees adentrarte en ella más profesionalmente, cualquiera que sea tu situación, recuerda tomarla en cuenta en el momento de elegir un coach, ya que dependerá mucho tu experiencia, condición y objetivos para elegir al idóneo para ti.
Por ejemplo, puede ser que cuentes con poco tiempo de haber empezado, pero crees que te hace falta alguien que te empuje más allá o que te motive a continuar; en ese caso, un entrenador con experiencia en clientes principiantes sería lo que estás buscando.
Otro aspecto a tener en cuenta, como en todo, es tener presente y respetar el presupuesto con el que nos sentimos cómodas, preguntarte cuánto estás dispuesto a gastar en tus entrenamientos, e igualmente importante, cuánto tiempo puedes invertir para adherir las sesiones a tu estilo de vida de la manera más orgánica posible.
¿En línea o presencial?
Relacionado a lo anterior, tal vez solo necesites un plan que seguir y asesorías en línea los fines de semana, o tal vez sea mejor para ti alguien que esté constantemente supervisándote; te conoces, sabes que si no te están viendo olvidarás tus sesiones de práctica por estar en el celular, o tal vez eres disciplinada y no requieres más que de un leve empujón en la dirección correcta, todos estos son aspectos a tomar en cuenta.
Al respecto, Sonia Chávez, directora de Soy Corredora, nos insta a comenzar el entrenamiento con metas realistas y un día a la vez. “Es fácil saltarse los entrenamientos, sobre todo si no hay alguien supervisándote, y lo más complicado es seguir un programa por voluntad propia, sabiendo de antemano que al principio será complicado, pero los resultados definitivamente superan cualquier dificultad en el camino”.
Revisa sus credenciales y experiencia
Uno de los aspectos más importantes a tomar en cuenta es asegurarse de que el coach contactado sea un profesional, que cuente con suficientes credenciales que lo acrediten y sobre todo, que cuente con un historial de clientes que avalen su trabajo.
Es una buena idea, por ejemplo, pedirle testimonios de casos que se parezcan al tuyo y que te cuente cuáles fueron los resultados, así podrás comenzar el entrenamiento con más confianza y con la seguridad de que tu salud y seguridad están en buenas manos.
Finalmente, otro buen consejo es pedir ayuda a otros corredores que conozcas para que te pasen el contacto de entrenadores con los que ya han tenido una buena experiencia, y para esto puedes acercarte a distintos círculos deportivos presenciales o en internet, como Soy Corredora, o incluso pedir informes en escuelas especializadas o en academias deportivas, sitios donde los requisitos para enseñar son altos.