El pequeño local de mariscos de 50 metros cuadrados que a finales de los años 80 iniciaron Simón Hamparzumian, su esposa y sus tres hijos, en Naucalpan, al cual llamaron Fisher’s, es hoy un negocio corporativo con más de 2 mil colaboradores y uno de los pocos restaurantes que no ha tenido pérdidas en su plantilla laboral durante los dos años que tiene la pandemia de Covid-19.


El grupo Fisher’s, que atiende un promedio de 250 mil clientes cada mes, planea una
expansión hacia Europa y Estados Unidos, “en la cual invertiremos 500 millones de pesos,
lo cual contemplaría 4 unidades, además de ampliar su operadora, así como la creación de
dos nuevos conceptos gastronómicos”.

Manolo Ablanedo, socio y director de marketing, alianzas y gobierno del grupo


Asimismo estos planes de internacionalización iniciaron en 2021, pero se detuvieron debido a la
crisis sanitaria; sin embargo, Fisher’s es uno de los pocos restaurantes que tuvieron la
fortuna de no cerrar sus puertas, y este año abrirán su primer restaurante en Madrid en el
mes de enero, y uno más en San Diego, aunque de este aún no hay una fecha
programada.


La idea de expandirse hacia otras latitudes inició hace más de 10 años, “de hecho, había la
intención de instalarse en el Caesars Palace de Las Vegas y Miami, lo que no se concretó a
consecuencia de la crisis de 2008-2009, comenta Ablanedo.
Con 33 años en el mercado, la marca cuenta ya con 21 Fisher’s, 4 Fisher’s House, 1 Decrab
y 1 Don Capitán, sumando en total 29 establecimientos.


Apertura en Madrid


La apertura del establecimiento Fisher’s en Madrid, específicamente en el distrito de
Salamanca, será este 21 de enero en la calle de Velázquez 41. Se trata de un local de 35
mesas en el las personas que lo visiten, podrán disfrutar de la gastronomía que hasta hoy
ha caracterizado al restaurante de marisco.


Esta sucursal estará operada por uno de los socios, Lalo Noriega, quien vive ya en España
con la intención de hacer crecer la marca en Europa, aunado a un grupo de colaboradores
mexicanos; aunque también se contempla hacer contrataciones de personal local, lo que
contribuirá al crecimiento económico de la zona.

La idea del concepto será la misma que ha tenido Fisher’s a lo largo de estas tres décadas, así que mantendremos el estilo muy peculiar mexicano que le hemos dado a nuestros platillos; obviamente no pueden faltar en nuestro menú los tradicionales tacos de camarón, las almejas Fisher’s, los camarones petroleros, los lomos Simons y la cazuela de mariscos, además de las bebidas icónicas, como el Pepillín o la Modelada”, explica el socio y director de marketing, alianzas y gobierno de grupo Fisher’s.

Manolo Ablanedo, socio y director de marketing, alianzas y gobierno del grupo


“La magia de Fisher’s es ser Fisher’s, sin embargo, la carta está pensada y adecuada a Madrid, pero cuando nos visiten, todos los patillos tendrán la misma sazón, será como estar en México”, agrega Ablanedo. En cuanto a la sucursal de San Diego, aunque ya existe un local, no tiene una fecha
definida todavía, pero se tiene planeada a lo largo de este año.


El directivo considera que no existe ningún riesgo en su internacionalización. “Al contrario,
creo que el no hacerlo es nuestro riesgo, estamos seguros de que Fisher’s es para todos y
también se lo merecen en Madrid y San Diego y, sobre todo, estoy feliz de que se hable de
México pues Fisher’s es mexicano y México está de moda en el mundo”.


Acción en pandemia


En cuanto a su estrategia para sobrevivir en la pandemia, el directivo especificó que su
objetivo siempre ha sido cuidar la salud de todos, sobre todo la mental, así como
reinventarse todos los días y tomar decisiones de acuerdo a cómo lo determinen las
autoridades frente a la situación sanitaria.


Lo que nos ayudó fue el cariño y lealtad que los clientes, amigos y familia tienen por la
marca. Nos dimos cuenta que es muy querida y que reaccionamos inmediatamente para
adaptarnos al cambio”.

Manolo Ablanedo, socio y director de marketing, alianzas y gobierno del grupo


Aunado a esto, Ablanedo destaca el apoyo y la sensibilidad de las autoridades del
gobierno de la Ciudad de México, que también fueron clave para lograr que la industria
restaurantera sobreviviera gracias al programa Ciudad al aire libre, que describe los
lineamientos de protección de salud para restauranteros en la nueva normalidad.


Dentro de estas normativas están el uso de sus propias terrazas, estacionamientos o
franjas habilitadas sobre arroyo vehicular, banquetas u otras opciones al aire libre que
permiten la convivencia más sana y segura. “Sin duda, nos está dando gasolina para
aguantar y para recuperarnos más rápido, y los clientes lo tomaron como un espacio más
seguro y en el que prefieren estar”.

Por Liliana Sandoval Galindo

Lic. en Trabajo Social por parte del Instituto Mexicano de Psicooncología (IMPo), Periodista de Oficio. Gerente de Operaciones en Visor Empresarial.

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