Se ha extendido el uso de las criptomonedas y al mismo tiempo que ha aumentado la adopción de medios electrónicos de pago en todo el mundo.
Asimismo de acuerdo con Statista, a partir de la depreciación que han sufrido algunas monedas latinoamericanas, los consumidores ven en el dinero virtual una alternativa de resguardo del valor de sus ahorros. Bitcoin es la moneda digital que cuenta con el uso más extendido en América Latina, si bien también existen otras como ethereum, dash y litecoin.
Sin embargó el uso de cajeros automáticos que operan con criptomonedas ha crecido en América Latina, de hecho, el sitio web Coin ATM Radar, revela que Colombia es el país con la red más amplia de cajeros, un total de 60. Panamá es el segundo país con más cajeros de bitcoin, con 18 locaciones en total y República Dominicana sigue en tercer lugar con un total de 16 cajeros. En Argentina existen 13 cripto cajeros, la mayoría ubicados en Buenos Aires y México cuenta en la actualidad con 10.
Según Google Trends, en los últimos 90 días del año en México se ha incrementado el interés en la moneda digital bitcoin, particularmente en los estados de Quintana Roo, Baja California, Querétaro, Jalisco y Nayarit.
También Héctor Sosa, autor del blog y podcast Adiós a tu jefe y autor de los libros Inversiones: todo lo que necesitas saber para empezar a invertir y Múltiples fuentes de ingreso: cómo ganar dinero en internet, subraya que el bitcoin es una criptomoneda que llegó para quedarse. “No veo la forma en la que puedan sustituirla o que un nuevo competidor pueda hacerlo, porque es un protocolo que va evolucionando, al final de cuentas es software. El bitcoin de 2009 ya no se relaciona con el bitcoin que tenemos hoy, se han agregado casos de uso, mejoras y protocolos, se ha ido robusteciendo”.
Para Julio Chauvet, director general de la academia de trading Aprende Invirtiendo y cofundador del Foro Inversiones, las criptomonedas son un actor clave dentro del ecosistema de Finanzas Descentralizadas o DeFi, cuyo objetivo es superar al sistema financiero tradicional en los próximos años, ya que no requiere intermediarios para funcionar, se ejecutan sobre contratos inteligentes y brindan a los usuarios una mayor apertura financiera. “Bitcoin no puede ser regulado, manipulado o censurado por los gobiernos, ese es su gran poder, que no lo pueden parar, porque es descentralizado, es público, democrático, cualquier persona puede comprarlo, venderlo, transferirlo o almacenarlo, no necesita el permiso de ningún Gobierno, no requiere dar los datos de un usuario a una institución financiera, es una libertad muy grande la que da a las personas, y esto se puede comprobar en países como Venezuela o Argentina, donde tienen tantos problemas y devaluación que los ciudadanos han encontrado en bitcoin una manera de preservar el valor de su dinero y lo ocupan de forma cotidiana, incluso quienes no están familiarizados con esta criptomoneda. Eventualmente esa adopción será global, estimamos que en un periodo de cinco años serán más personas las que van a realizar transacciones con bitcoins y otras criptomonedas”.
Con el propósito de tener un panorama claro respecto a por qué bitcoin debe formar parte del portafolio de inversión de pequeños y grandes inversionistas, Héctor Sosa y Julio Chauvet comparten la siguiente información:
- ¿Qué es bitcoin? Es un protocolo que nació a inicios de 2009 y está totalmente enfocado en construir un dinero sólido, lo cual consigue a través de la combinación de diversas tecnologías.
- Criptografía de bitcoin. Permite que no se pueda descifrar, hackear o alterar la información. Por otro lado, para que se genere cada bloque de bitcoin se requiere un minado o prueba de trabajo aproximadamente cada 10 minutos, lo que se hace con equipo de cómputo o nodos repartidos en todo el mundo, los cuales compiten para resolver un problema matemático complejo y el primer nodo que lo obtenga tiene el privilegio de registrar ese bloque y como recompensa gana una fracción de bitcoin.
- Blockchain. El registro contable queda en los bloques que están concatenados y toda la historia está registrada en los nodos que se han creado a través del tiempo en la red, lo que hace que sea infalsificable y tenga una oferta monetaria preestablecida, es decir, no se pueden crear más de los que se programaron desde que surgió esta criptomoneda, en total serán alrededor de 21 millones de bitcoins. “Ya estamos por arriba del 80 por ciento de bloques minados y el resto se va a minar de aquí al próximo siglo”, enfatiza Sosa.
- Moneda digital finita. Cada vez habrá menos bitcoins que ingresen al sistema, por eso se dice que es una oferta monetaria finita que nadie puede alterar, lo que representa su cualidad más importante y la posiciona como reserva de valor porque nadie puede decidir cuántos bitcoins crear, contrario a lo que hacen los gobiernos con la emisión de moneda. Como la emisión se va haciendo cada vez más pequeña y está preestablecida, lejos de generar inflación el bitcoin provoca una deflación.
- Máximos históricos. En cada ciclo bitcoin llega a nuevos máximos históricos. “Entra una fase de euforia, hay una burbuja y después cae pero no a los niveles del Halving previo o del ciclo anterior, que es cuando son validadas de forma global 210,000 cadenas de bloque y la recompensa ofrecida a los llamados mineros disminuye a la mitad. Esto se puede ver claramente en el ciclo alcista de inicios de 2017, cuando un bitcoin valía menos de 1,000 dólares y al final llegó a costar casi 20,000 dólares. En el nuevo Halving o ciclo de inicios de 2021 estaba a 29,000 dólares y en marzo casi alcanza los 60,000 dólares”, explica Chauvet.
- Nuevos compradores. Empresas como Tesla, MicroStrategy, Square y varios fondos de inversión desde 2016 han adquirido bitcoins como reserva de valor porque saben que el dólar se ha debilitado por la emisión excesiva. “Lo que va a pasar este año es que cada vez más empresas van a comprar bitcoins y eso va a hacer que el precio siga subiendo, pronosticamos que puede superar los 200,000 dólares por bitcoin en la fase de euforia de este nuevo ciclo alcista, que ocurre cada cuatro años después del Halving. Asimismo, entrará mucha gente nueva cuando estemos en esos niveles y perderá dinero cuando la burbuja explote, pero es probable que se quede en 80,000 dólares como nuevo piso. Esto es lo que estamos viendo con base en información histórica, el comportamiento de las empresas, la alta demanda y la escasez que se observa en plataformas de intercambio como Bitso o Binance”, detalla el podcaster Héctor Sosa.