Por la constante violencia que se vive en el país de México, las mujeres unen fuerzas y sus voces para sus protestas escribiendo en monumentos icónicos para pedir que que acabe con esta violencia que cada vez se agrava más.
Debido al suceso se logro que 50 líderes, activistas, artistas, funcionarias, abogadas, investigadoras, académicas, defensoras de derechos humanos, tomadoras de decisiones, feministas consagradas y promotoras de la justicia a favor de la vida de las mujeres hicieran un llamado en común: un alto a la violencia contra la mujer en México.
Como es de esperarse el gen enero femenino exigió al mandatario de México ndrés Manuel López Obrado que se posicione a favor de las mujeres y de su lucha, es decir, en pro del feminismo, que llame los hechos por su nombre y no los reduzca a un problema de rivalidades políticas.
Cabe resaltar que esto es una invitación o en general a la sociedad a comprometerse con la causa y a contribuir por igual en la erradicación de la cultura machista y a dejar de normalizar la violencia contra las mujeres y niñas en los entornos cotidiano, doméstico, laboral y educativo.
Por otra parte la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, mencionó el aumento de denuncias en la institución por violencia familiar y la recomendación que hizo al Estado mexicano por su inacción para atender la violencia de género. La CNDH cobró relevancia particularmente meses atrás por la toma de sus instalaciones a manos de feministas y madres de víctimas de feminicidio, cansadas de la impunidad.
La artista visual Mónica Mayer puso el foco del debate en la importancia de la economía justa como una forma de liberación, así como en las tareas de cuidados que se han incrementado en la pandemia por el Covid-19, lo que provoca una doble o triple jornada de trabajo en mujeres.